Buenas a todos, os escribo por primera vez en bastante tiempo. Ya me encontraba deseoso de hacer artístico (dibujar y escribir) y no pude resistir la tentación de hacerlo.
Esta vez vengo con un nuevo episodio del “Bloc de Wemento”, en el cual empleo una nueva técnica no vista hasta ahora en capítulos anteriores. Concretamente el dibujo con tinta china.
Recientemente adquirí por internet un set de tinta, plumilla y bloc de hojas para tinta formato DIN A5. No recuerdo si llegué a comentároslo, pero así es. La página a través de la cual efectué el encargo (con la cual me encuentro muy contento) se llama Totenart. Se trata de una tienda online sita en Valencia, ¡esa gran cuidad!, con una buena gama de productos artísticos y buenos precios (en el caso de compras de varios productos). Esto no es más que un poco de publicidad gratuita que les hace un cliente satisfecho.
Pero volvamos al tema del capítulo 4 de esta serie. Esta técnica, que siempre quise probar, consiste en, una vez dibujado el boceto inicial, remarcar las líneas del mismo por medio de la plumilla. Esta plumilla se moja en la tinta china de tal forma que, por medio de capilaridad, retiene una ligera cantidad de tinta, suficiente como para tintar un trazo de corta longitud en el papel. Con algo de paciencia y precisión se remarca todo el boceto y una vez hecho esto se procede al rellenado de los negros. Cabe destacar que esta técnica es monotono, únicamente emplea el negro como “color”, siendo el blanco la ausencia de tinta. Y por supuesto, luego podrían colorearse los dibujos sin problema alguno.
En el rellenado de los negros se emplean pinceles, cubriendo así grandes superficies. Una vez se rellena el dibujo completo, se procede al borrado de las líneas de boceto, concluyendo finalmente el proceso relativo a esta técnica.
Como veréis el resultado es muy interesante. Ofrece una imagen de gran contraste. Esta técnica se emplea para los cómics que posteriormente (o no) serán coloreados, conservando el negro como sombreado de mayor oscuridad.
Todo esto que os he detallado podréis verlo de manera secuencial en el vídeo de este cuarto capítulo. Tened en cuenta que, literalmente, éste es el segundo dibujo que realizo con tinta china (el primero es éste, donde como podéis ver fracasé estrepitosamente por no agitar la tinta previamente, quedando ésta muy aguada).
El tema del dibujo es el de una mujer con peinado ochentero (¿o setentero?) sentada frente a un interlocutor con el que dialoga, al que mira fijamente mientras el cigarrillo que sostiene entre sus dedos se consume lentamente. Me ha gustado especialmente dibujar los ojos y la mano con el cigarrillo, al igual que el pelo con su brillo. He metido la pata, por imprecisión, a la hora de retintar el labio superior, donde he añadido una sombra de más que quita algo de sentido al dibujo (pierde una profundidad razonable). Además de manchar el dibujo en el lado izquierdo sin ninguna clase de intención, por supuesto, y de haberlo realizado un tanto descuadrado.
Por último, quiero destacar que, en el limpiado de la imagen escaneada se ha perdido algo de calidad del dibujo. Como puede verse, las líneas dibujadas con plumilla se muestran pixeladas, sin suavizado de ninguna clase. Esto era el precio a pagar por resaltar el negro, sin que se viera con la diferencia de tonalidad que le otorgaba el escáner. En mi Deviant podréis ver el dibujo fotografiado, en lugar de escaneado, donde podréis verlo en estado original.
En fin, os dejo con el vídeo. Espero que os guste.
Salu2
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